Comunión espiritual de San Alfonso María de Ligorio



Señor Jesús, creo que estás realmente presente en el Santísimo Sacramento del altar.

Te amo por sobre todas las cosas y deseo fervientemente recibirte en mi alma.

Pero como no puedo hacerlo sacramentalmente, ven al menos espiritualmente a mi corazón.

(Pausa en silencio para la adoración)

Como si ya te hubiese recibido, te abrazo y me uno todo a ti.

No permitas jamás que pueda abandonarte amén.




Raúl Bravo