Consagración de la familia a los Sagrados Corazones de Jesús y María



Santísimos Corazones de Jesús y María, unidos en el amor perfecto, como nos miráis con misericordia y cariño, os consagramos nuestros corazones, nuestras vidas, y nuestras familias.

Conocemos que el ejemplo bello de vuestro hogar en Nazaret fue un modelo para nuestras familias. Esperamos obtener, con vuestra ayuda, la unión y el amor fuerte y perdurable que os disteis.

Que nuestro hogar sea lleno de gozo. Que el afecto sincero, la paciencia, la tolerancia, y el respeto mutuo sean dados libremente a todos. Que nuestras oraciones incluyan las necesidades de los otros, no solamente las nuestras. Y que siempre estemos cerca de los sacramentos.

Bendecid a todos los presentes y también a los ausentes, tanto difuntos como vivientes; que la paz esté con nosotros, y cuando seamos probados, concedednos la resignación cristiana a la voluntad de Dios.

Mantened a nuestras familias cerca de vuestros Corazones; que vuestra protección especial esté siempre con nosotros. Sagrados Corazones de Jesús y María, escuchad nuestra oración. Amén.




Hijo y Siervo de María


www.magnificat.es