ración a
Jesús solitario en el Santísimo Sacramento
(antes de acostarse)
¡h Divino Jesús! que durante la noche estáis solitario
en tanto tabernáculos del mundo, sin que ninguna de vuestras criaturas vaya a
visitaros y adoraros. Yo os ofrezco mi pobre corazón, deseando que todos sus
latidos sean otros tantos de amor y adoración. Vos, Señor, estáis siempre en
vela bajo las especies Sacramentales, vuestro amor misericordioso nunca duerme
ni se cansa de velar por los pecadores.
¡h Jesús
amantísimo!, ¡Oh Jesús solitario!, haced mi corazón cual lámpara encendida; en
caridad se inflame y arda siempre en vuestro amor. Vela ¡oh centinela Divino!,
vela por el mísero mundo, por los sacerdotes, por las almas consagradas, las
extraviadas, por los pobres enfermos cuyas noches interminables necesitan tu
fortaleza y tu consuelo, por los moribundos y por ésta tu humilde sierva que,
para mejor servirte, descansa pero sin alejarse de Ti, de tu Sagrario... donde
vives en la soledad y el silencio de la noche.
ea siempre bendito, alabado, adorado, amado y
reverenciado el Corazón Sagrado de Jesús en todos los Sagrarios del mundo.
Amén.
Miguel Lopez